sábado, 6 de diciembre de 2014

LA LUNA LLENA LLEGÓ



La Luna Llena llegó
alumbrando su mirada
y agitando un corazón
que ya a penas palpitaba.

Al oído le contó
que en las noches la escuchaba
retorcerse de dolor
suplicando ser amada.

Poco a poco aquel dolor
penetró hasta sus huesos
y su piel palideció
porque había muerto por dentro.

Al ver eso, la Luna
se moría de dolor
pues su amiga y confidente
había perdido la razón.

Pero ella, que menguaba
no podía hacer gran cosa
intentaba consolarla
y le mandaba mariposas.

Y encendía las estrellas
para hacerle comprender
que la luz que lleva dentro
siempre ha de permanecer.

Y después de un tiempo oscuro
sin anhelos ni ilusión
su mirada volvió a brillar
pues la Luna Llena llegó.